Prometo ya no vanagloriarme de la supuesta locura que sufro… porque no la sufro, la vivo y hasta a veces me divierto con ella.
Pero a quienes deberíamos temerles más, como dice Q., es a los que no saben que están locos. Esos, dice, hacen cosas inesperadas, en cambio de los que decimos que estamos locos siempre se lo esperan y resultan ridículas, nada originales, por supuesto esa es mi opinión, no de las demás personas, ellas si creen que estoy loco de verdad.
A veces pienso que unas pepas solucionarían todo…pero todo lo que soy es esta locura, no quedaría nada y eso me da aun más miedo, es decir me da más miedo ser cuerdo recordando que era loco, que loco sabiendo que estoy loco. Creo que no creo en el equilibrio.
Hace unos meses una flaca me ofreció vivir con ella, prácticamente dijo que me mantendría, que ella trabajaría, que tenia una tv y un equipo y suficiente dinero para comprar lo que nos faltara, alquilaría un cuarto y nos haríamos amantes, ella podría salir con cualquiera como yo hacerlo también, como lo estaba haciendo hasta ahora, que despertaríamos juntos cuando en verdad lo deseemos y pelearíamos como todos lo hacen y que al final nos soportaríamos como todos lo hacen y todo parecía bien, pero para que una persona quisiera vivir conmigo debería estar más loca que yo, así que le deje hablar, mientras no follábamos, toda la noche y todo el día sobre sus planes y como encajaba yo en ellos.
Se sentía sola, es lo que creo, y no hablaba en serio, bueno, lo hablaba en ese instante, pero sabia que nunca pasaría, pero que por el momento eso le ayudaba a pensar que no estaba sola, que alguien tan loco que podía soportarla viviría con ella, lo siento, no lo estoy de esa manera.
imagen: google
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